El CEIP Andrés Miró se encuentra en el pueblo sevillano de "El Pedroso". Éste está a 65 Km de la ciudad.
Acceder al centro es un poco dificultoso debido a su ubicación. Los alumnos que acuden a él vienen de diferentes ciudades, tienen mucho problemas porque el centro está un poco olvidado tiene muchas carencias. En época de cosechas los alumnos se asúntenla de clase debido a que tienen que ayudar a sus padres en el campo lo cual también dificulta sus aprendizajes. Los progenitores de los discentes tampoco se preocupan por la situación en la que se encuentra el colegio de sus hijos.
Mi nombre es Marisa Blanco, tengo 41 años, soy profesora de cuarto de primaria C. Un día cualquiera es muy estresante para mí; a las ocho menos veinte de la mañana llego al colegio donde doy clases a niños de cuarto de primaria. Al entrar lo primero que hago es ir a la sala de profesores donde me encuentro con los demás profesores de mi departamento y discutimos y nos ponemos de acuerdo en cuanto a los contenidos que vamos a llevar a cabo en las clases ese día. También lo dedicamos a solucionar los problemas que se puedan presentar. Actualmente tenemos a un chico con una pierna rota y que no puede subir a dar clase a la planta de arriba por lo que hemos tenido que habilitar una clase debajo de forma improvisada para que éste pueda asistir al colegio cada día. También tengo problemas con una niña que es muy conflictiva y esta semana le ha quitado a un alumno su estuche, con lo cual otra profesora y yo hemos tenido que acudir a la dirección porque esta chica molesta demasiado en clase y se dedica a intimidar a los demás compañeros. Además de todos estos problemas que surgen cada mañana tengo a dos chicos discapacitados en clase que necesitan una atención especial por lo cual mi clase la tengo que adaptar a sus capacidades para que no se sientan discriminados ni inferiores a otros. Tras la pequeña reunión de cada mañana acudo a mi clase, al llegar siempre me encuentro a todos los críos revolucionados, levantados y hablando muy fuerte, entiendo que están en una edad en la que estas acciones son normales pero aun así siempre les explico que antes de que la profesora llegue ellos deben estar sentados y con los materiales preparados encima de la mesa debido a que así no perdemos tantos minutos de clase y no será necesario apresurar los contenidos al final del trimestre. Depuse me dispongo a explicar los contenidos que he preparado con anterioridad. Mis clases suelo hacerlas dinámicas y entretenidas y para ello dedico la primera media hora a dar la parte teórica en la que desarrollo los contenidos del temario. En la media hora restante propongo algún juego o actividad en grupo para así conseguir mantener la atención de todos los alumnos de clase. Los lunes y los miércoles tengo dos horas libres que las dedico los lunes a dar tutorías a los padres de los alumnos y los miércoles en mis horas libres si no tengo que sustituir a ningún profesor hago la planificación de mis clases por días. Además los miércoles por las tarde de cuatro de la tarde a siete tengo tutoría con los padres también. Me suelo reunir con los padres de mis alumnos una vez o dos por trimestre porque soy de las que piensan que la unión entre escuela y padres hacen que la educación de los hijos sea más enriquecedora. Las demás tarde si no tengo ninguna reunión en el colegio las dedico a planificar bien mis clases. Y así es como cada día imparto clases en el colegio en el que trabajo.
En cuanto a mi forma de ser puedo destacar que soy una persona muy organizada y responsable que me gusta escuchar a mis alumnos y dedicarles a cada uno de ellos la atención y el tiempo necesario para solucionar sus carencias o problemas. Suelo ser querida por todos ellos, no me gustan los castigos, soy de las que piensa que el dialogo con los niños es mucho más productivo. Aunque hay ocasiones en las que no tengo más remedio que imponer alguna sanción a alguno de mis alumnos como, por ejemplo, ha ocurrido estas semana con la chica que le ha robado el estuche a su compañero, ésta es demasiado problemática y tras haber hablado en reiteradas ocasiones con ella no me queda más remedio que acudir al castigo y a llamar a sus padres para que tenga constancia del comportamiento de su hija en clase.
En lo que a mis compañeros respecta suelo llevarme bien con todos ellos, me cuesta trabajar en equipo con ellos porque me gusta llevar siempre la iniciativa y mandar en todos los trabajos que realizamos juntos, pero después de llevar más de 20 años dando clases, ya voy aprendiendo a tener más paciencia.
En lo referente a mi vida privada cabe destacar que estoy casada tengo tres hijos uno con 19 años y dos niñas gemelas con 10 años. Los suelo ayudar a hacer sus deberes y aunque esté trabajando intento dedicarles todo el tiempo posible.
Muy bien, con tu aportación personal. Buscando tu camino de futura profesional. Saluditos Lola
ResponderEliminar